TUTOR PERSONAL
Al inicio de la residencia se adjudica una tutora a cada residente que será la que velará de forma más directa por el bienestar del residente y la formación en las distintas áreas, aconsejando la elección de cursos, participación en estudios, las rotaciones opcionales, la preparación de sesiones, etc.
EVALUACIÓN
El Real Decreto 183/2008 de 21 de febrero regula distintos aspectos de la evaluación. En principio, la evaluación es continuada y debe ser primordialmente efectuada por los tutores y por los jefes de las unidades por donde el residente va rotando. Existen unas fichas donde se recoge la calificación referida a conocimientos y habilidades y actitudes. Además, la participación en actividades asistenciales, docentes y de investigación se debe reflejar en el “Libro del Residente”, con el visto bueno de los responsables de cada actividad.
Para la evaluación del residente se tienen en cuenta las entrevistas con el tutor personal, la opinión del mismo en cuanto a la consecución de objetivos marcados al inicio de cada rotación, las puntuaciones de las hojas de evaluación de cada rotación, el cumplimiento de los cursos de competencias comunes, la asistencia y presentación de sesiones y los proyectos de investigación si los hubiere.
Al acabar la residencia, el comité de evaluación propone la calificación final, que debe ser refrendada por el Ministerio de Sanidad que es quien propone al MEC la expedición del Título de Especialista. Al término de cada periodo de doce meses de residencia, se realiza la evaluación anual de cada Residente por parte de un comité de evaluación.